Errores a evitar durante tu primer día como modelo webcam

Fecha publicación: 28/07/2021

Trabajar en la webcam puede ser el oficio que siempre soñaste. Un trabajo que, entre muchas otras cosas, te permitirá ser tu propia jefa y trabajar desde casa. No obstante, antes de comenzar a chatear con los usuarios debes tomar una serie de precauciones para no echar a perder tu primer día. Recuerda que la primera impresión que des a los usuarios puede influir de manera decisiva entre terminar siendo una modelo webcam eficiente o todo lo contrario. De todos modos no tienes por qué alarmarte, pues tener fallos durante los primeros días como camgirl es algo muy común. Incluso las modelos más experimentadas cometen errores. En este post, hemos querido darte a conocer los errores más comunes en los que incurren las modelos el primer día. Conociendo los fallos de ante mano, podrás evitarlos fácilmente. Presta atención.

1. Luchando contra el paso del tiempo en el privado

Resulta muy común quedarse en blanco cuando se es principiante en el chat erótico . Las chicas que empiezan a emitir, una vez que están en la sala privada con el cliente, a menudo no saben cómo comenzar a interactuar. En otras ocasiones puede que todo lo que se ha programado (prácticas eróticas, charlas de contenido sexual…) tan solo de para ocupar unos minutos en el privado. Llegado este punto, es normal que te pongas nerviosa y que empieces a mirar cómo pasa el tiempo sin decir o hacer absolutamente nada. Un fallo que puede costarte muy caro en tu primer día de trabajo. Relájate, respira, baja el ritmo. Cuando un usuario decide llevarte al privado es porque de verdad le atraes y espera algo especial de ti. Tú, como modelo webcam , lo que debes hacer es darle la bienvenida, ser amable, cariñosa y escuchar lo que quiere decirte. No te precipites. Si no sabes cómo empezar, tal vez sería conveniente que comenzases con una conversación lo más natural posible. Una charla que os sirva para conoceros y cortar los nervios.

2. No prestar atención a la imagen

Aunque pueda parecer sorprendente, muchas modelos principiantes empiezan su primer día sin maquillar, sin peinar o con la ropa de andar por casa. Recuerda que las webcams eróticas son un servicio para adultos. Por tanto, la imagen lo es todo. Antes de encender la cámara, asegúrate de estar bien vestida, maquillada y peinada para la ocasión. Utiliza vestidos provocativos, lencería erótica; cuida tus cosméticos, tu pedicura y tu manicura. Tampoco descuides tu lugar de trabajo. Tu dormitorio debe estar limpio, ordenado y bien iluminado. Por último, no olvides enfocar bien la webcam.

3. Fijarse solo en un usuario específico

Por norma general, durante tus primeros días muchos usuarios del videochat erótico querrán entablar conversación contigo. Quizás, solo uno quiera llevarte a la sala privada desde el principio. Esto puedo llevarte a cometer un fallo muy común entre las principiantes: prestar solo atención al primero que accede a llevarte al privado. Tienes que tener en cuenta que durante los primeros días los usuarios quieren –antes de pagar- conocer cómo eres. Si solo prestas atención al primero que acceda al privado contigo, perderás muchos clientes potenciales en los próximos días y semanas. Debes estar abierta al mayor número posible de usuarios. De lo contrario, estos se aburrirán con tus shows y terminarán por irse a la sala de otra modelo de trabajo webcam . Si necesitas ayuda con esto, recuerda que siempre puedes pedir asesoramiento a nuestros monitores de estudio. Ellos te darán ideas muy ingeniosas para que tus fans se diviertan siempre contigo.

4. Intentar ser demasiado seductora

Ser webcamer significa que debes dominar a la perfección el arte de seducir a los hombres. Tienes que saber coquetear con ellos, insinuarte, decirles cosas que los exciten. En definitiva, que tus acciones y tus palabras hagan que no quieran irse de tu sala. Sin embargo, esto no se aprende con una sola sesión de erotismo en vivo. Cuando se es principiante en este trabajo, los nervios suelen jugar malas pasadas. Por querer ser muy seductora, se termina siendo todo lo contrario. Se hacen movimientos demasiado exagerados, o posturas forzadas, o se dicen palabras poco creíbles. No te preocupes, suele suceder muy a menudo. De nuevo, relájate y ves poco a poco. No vayas directa al grano desde el comienzo.

5. Hacerse pasar por otras

Una de las recomendaciones que solemos dar a nuestras modelos nuevas es que tomen ejemplos de las veteranas. Que se fijen cómo visten, a qué horas están en línea, qué hablan con sus fans, cómo coquetean con ellos, etc. Sin duda, esto te resultará de gran ayuda durante los primeros días como modelo webcam . Sin embargo, el problema surge cuando solo copias lo que hacen las compañeras con más experiencia. Cuando dejas de ser tú misma para ser la sombra de quien copiaste. Esto, por supuesto, hará que te vuelvas rápidamente una chica aburrida ante los ojos de los clientes. Los usuarios quieren diversidad, que cada modelo sea distinta. Cuando entren en tu sala buscarán saber cómo eres tú, como es tu personalidad, cuáles son tus preferencias sexuales… Por tanto, siempre sé tu misma. No te compares con las demás chicas.

6. No prestar atención al chat

En realidad, este fallo lo cometen tanto las chicas nuevas como las más veteranas. Cientos de modelos que no prestan atención al chat. En su lugar, se dedican a estar con el teléfono móvil todo el tiempo, a ver la televisión, a charlar con familiares que están en la misma habitación que ellas, a contarles los chismes a sus amigas o, incluso, dejan la sala vacía. Trabajar en la webcam no consiste en esto. Hacer estas cosas está muy mal. Recuerda que esta profesión es como cualquier otra. Tienes que ser responsable y estar comprometida al cien por cien con lo que haces. Tus seguidores, es decir, quienes te están pagando no merecen esta falta de atención. Has de cuidar todo lo que puedas a cada uno de ellos, tratarlos con respeto y educación. Es la única manera de que este trabajo te resulte rentable. Por último, aunque te guste escuchar música durante tus sesiones, no olvides tenerla a un volumen adecuado.